domingo, 17 de enero de 2016

EL PROBLEMA DE LA INFORMALIDAD EN EL SECTOR TURISTICO EN CUENCA


EL PROBLEMA DE LA INFORMALIDAD EN EL SECTOR TURISTICO  EN CUENCA
Por Ing. Patricio Miller
La ciudad de Cuenca en los últimos años ha experimentado un crecimiento en la afluencia de turistas nacionales y extranjeros por el hecho de ser una ciudad muy hermosa en su aspecto físico, la limpieza es una de sus características principales, su belleza arquitectónica, natural, la riqueza histórica que la envuelve, no solamente la convierten en un referente del turismo nacional sino que es destino de categoría internacional. A pesar de que en el año 2003 el Municipio de Cuenca asume las competencias turísticas en la ciudad, las cuales son de promoción, regulación y control lamentablemente ejerce solamente la competencia de promoción con la creación de la Fundación de Turismo para Cuenca y sin sentar bases para un sólido crecimiento de la industria con una ley u ordenanza que regule desde hace diez años el cecimiento ordenado de la industria en la capital azuaya.

En rueda de prensa el sector hotelero del Azuay hizo un llamado de atención a las autoridades locales para que se controle la informalidad en la ciudad
Lamentablemente se descuida este aspecto preponderante para el sector lo cual crea un conflicto en la ciudad pues se desborda el crecimiento desordenado de la industria turística que se establece en cualquier espacio en la urbe, es decir no se cuenta con un uso y ocupación del suelo para el desarrollo turístico, situación que ha generado graves problemas para la ciudad. Según datos de la Universidad de Cuenca en algunas investigaciones realizadas indican que la informalidad en el sector es 2x1 es decir si según datos del Ministerio de Turismo al 2015 existen registradas en este ministerio 1450 empresas turísticas naturales y jurídicas la informalidad es el doble es decir 2.900 informales trabajan y laboran en la ciudad sin que nadie les diga nada, ocupando los servicios públicos como si fueran sectores familiares o domésticos, es decir luz, agua, a precio residencial, sin obtener permisos de funcionamiento, pagos de patentes, RUC, gas a precio subsidiado, es decir con ventajas y prevendas que el sector formal de la economía no lo tiene, por lo cual ingresan al mercado con precios inferiores al del sector formal haciendo imposible una competencia leal.
La informalidad se ha vuelto incontrolable en los cinco sectores que conforman la industria turística en Cuenca, en el sector de hospedaje, en alimentos y bebidas, en operación turística, transporte turístico y en otros servicios turísticos como revistas y paginas webs de turismo.  
 Cada vez aparecen más letreros en la ciudad en paginas webs, revistas informales ofertando casas y departamentos en renta a los turistas, popularizando la práctica de alojarse en segundas residencias que no están registradas o reguladas para el efecto.
Además observamos en la urbe los puestitos de comida, las famosas “huequitas” y barcitos estos son los negocios turísticos informales, que conocemos de sobra y que muchas veces aceptamos como parte de nuestros destinos turísticos.
Una de las páginas que a nivel mundial promociona la informalidad

Un hecho que debemos lamentar es que la informalidad no solo es aceptada por el consumidor, sino a veces también por el sector público, cuando por falta de reglamentación o leyes que como ente rector debería disponer, no controla esta situación. Si a esto se le suman los vendedores ambulantes nos damos cuenta de que la informalidad es uno de los problemas más grandes y más urgentes del turismo  no solamente de Cuenca sino del país.
La informalidad perjudica enormemente a los negocios formales a través de una competencia desigual en donde los unos pagan impuestos, tramitan sus patentes de operación, mantienen sus papeles en regla, asumen costos operativos durante todo el año y pagan por servicios básicos no subsidiados.
Los trabajadores del sector informal también se perjudican cuando laboran con miedo a ser desalojados, en horarios extendidos, sin contrato, en lugares inseguros, sin protección legal y sin los beneficios de ley. Y por supuesto se perjudican los turistas que no siempre pueden distinguir entre una oferta formal y un producto pirata y a quienes no siempre se les proporciona las seguridades físicas, de salud y jurídicas necesarias para garantizarles una buena experiencia en el destino.
La solución más obvia es que el Gobierno nacional o local (de acuerdo con las respectivas competencias), suprima la economía informal a través de la represión de ambulantes o el control y clausura de establecimientos. Sin embargo, también hay que pensar que la informalidad es a veces la primera forma de acercamiento de los pobres a la economía turística, y un primer paso para mejorar sus condiciones de vida.
Más que políticas de control y represión, urgentemente se necesitan políticas de formalización para el sector turismo. Estas deben ser ágiles y diseñarse tomando en cuenta el desinterés de los unos por formalizarse y la imposibilidad de que el sector público controle la informalidad por completo.
En otras palabras, formalizarse debería resultar mucho más ventajoso y más sencillo que ser informal, para esto el Gobierno local para el caso de Cuenca debe dar las facilidades que necesitan las personas que desean emprender en un negocio no sin antes hacerles conocer los pros y los contras que se generan al ingresar en el mundo del turismo.
Generalmente quienes poseen bienes inmuebles en el área histórica y patrimonial de la ciudad piensan que ponerse un hostal les va a generar grandes ingresos, sin tener la mas minima idea del negocio, sin tener estudios de factibilidad, sin medir las estadísticas que según órganos oficiales indican que el turismo en Cuenca esta en el 40% de ocupación al mes de junio de 2015  mientras que el año anterior a la misma fecha se encontraba en el 50% por lo tanto ha existido una disminución, probables causas aumento de la oferta de hospedaje, falta de promoción del destino, disminución y problema de conectividad en la ciudad que redunda en la baja de la demanda turística, es decir una serie de factores que se han conjugado para esta disminución en 10 puntos porcentuales la ocupación turística en la ciudad.
A esto debemos indicar que lo fuerte de Cuenca como ciudad son las reservas empresariales o viajes de negocios que se realizan semanalmente generalmente con la provincia del Guayas que se ha visto perjudicado por la conectividad, el abusivo y extenuante control que realizan la CNT del Ecuador que no permite el viaje de personas en furgonetas por la via al Cajas a pesar de los permisos correspondientes, se sigue con una política de vejación y maltrato a los turistas nacionales e internacionales sin precedentes en el pais por personas que no poseen la más mínima educación en lo referente a turismo y que a veces buscan más la coima que la seguridad y bienestar de la colectividad.