El coronavirus puso al turismo contra las cuerdas
La paralización del sector turístico nacional podría
generar pérdidas superiores a los $ 500 millones. Esta industria cuenta con
muchos encadenamientos, por lo que se verán afectados desde los pequeños
comerciantes de artesanías hasta las grandes empresas del turismo. Cerca de 400
mil son los empleos del sector que se encuentran vulnerables por la emergencia
a causa del COVID-19, hasta que las empresas cuenten con la liquidez para
mantenerlas.
El
sector turístico es uno de los más apaleados por la emergencia sanitaria.
En este momento, las industrias grandes y pequeñas y todos los involucrados en
esta cadena productiva están paralizados, pues el teletrabajo no
es una opción para ellos ya que sus actividades requieren principalmente del
contacto personal, por lo que las pérdidas económicas que se generarán son
altas y los despidos masivos serán otra consecuencia de la emergencia
sanitaria.
El
sector del turismo está compuesto por algunas variables, pero las que más
contribuyen son la industria de alojamiento y servicio de comida y el
transporte. El transporte, aunque contribuye a todos los sectores de la
economía, tiene una relación directa con el turismo. El sector de alojamiento y
comidas aporta en promedio 2,15% al PIB y se ha mantenido relativamente
constante en el tiempo. Pero si analizamos la tasa de variación anual se
distingue que su comportamiento fue bastante favorable en los últimos tres
años, con una tasa de variación de hasta el 6%, aunque para 2019 su
tendencia cayó notablemente en 3,7%
El sector turístico, según el World Travel &
Tourism Council, contribuye un 6% al PIB del Ecuador y un 10%
al PIB global. Las contribuciones que genera este sector son importantes para
la economía ya que tiene una extensa cadena productiva entre alojamiento,
transporte, alimentación, espacios públicos y privados, recreación y cultura,
artesanías, entre otros. Hasta enero de 2020 generó 477.382 empleos
y, además, es una fuente trascendental de divisas para la economía dolarizada
ya que dejó un saldo positivo de $ 512 millones en el tercer
trimestre de 2019. Aunque la tasa de variación decreció un 13% en contraste con
el mismo periodo del año anterior (Tabla 1).
Por ello, las pérdidas ocasionadas en el sector por
la crisis sanitaria afectarán, al menos, en un 0,5% al PIB nacional.
Según el viceministro de Turismo, Ricardo Zambrano, se estima que las pérdidas
por la paralización de esta industria en un periodo de 30 días bordeen los $
150 millones, en 60 días podrían alcanzar los $ 345 millones
y en 90 días llegarían incluso a los $ 540 millones (el 0,5%
del PIB aproximadamente).
Estas pérdidas son el principio de despidos masivos
en la industria, pues llegará un punto en el que las empresas ya no tendrán la
capacidad de cubrir los costos operativos sin estar en
funcionamiento. La falta de liquidez hará que, en primera
instancia, se pierdan 200.000 puestos de empleo y, en un mediano plazo, podría
incluso alcanzar los 400.000 empleos.
¿QUÉ SE PUEDE ESPERAR?
La Organización Mundial del Turismo
estima un decrecimiento detonante en las llegadas de turistas internacionales a
nivel mundial, entre -20% y -30% para este año. Este declive
podría representar una pérdida en este sector a nivel mundial
de entre $ 300.000 y $ 450.000 millones por exportaciones
turísticas (ingresos).
Las previsiones que ha realizado
la OMT son con base en el SRAS y la crisis del 2009, pero se comparan con la
crisis actual, por lo están en permanente monitoreo. No
obstante, el órgano asegura que millones de puestos de trabajo a nivel mundial
están en peligro y solicita crear mecanismos para la supervivencia de las
empresas. Principalmente porque este sector tiene una alta capacidad de
recuperarse y de tener un efecto multiplicador en la
recuperación de otros sectores.
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